Porque el que esto escribe lleva muchos años sin tomar azucar y con el clásico sustituto de sacarina y últimamente estaba escuchando mucho run-rún en contra de los edulcorantes artificiales…
Y en fin, aquí un artículo que dice lo contrario…a ver en que termina todo esto.
Vamos chavales!
Estudios hablan sobre la debatida incidencia de los sustitutos del azúcar en la salud
Mucho se ha hablado de los posibles efectos adversos que provocan los comúnmente utilizados como sustitutos del azúcar, sobre todo incidiendo en un posible riesgo cardiovascular, sobre la tensión arterial y en la salud en general.
Recientes estudios publicados en por la Universidad de Oxford analizan precisamente este asunto, a través de trabajos que hablan sobre la debatida incidencia de los sustitutos del azúcar en la salud. Estas son sus conclusiones.
Según estas publicaciones, basadas en estudios que evaluaron críticamente la eficacia del glicósidos de estevio (compuesto en el que se basan muchos de los endulzantes alternativos al azúcar tradicional), llevadas a cabo a través de nueve estudios con más de 700 particpantes, se descartó la relación entre su consumo y posibles efectos secundarios nocivos para la salud, siendo incluso aptos para el consumo de personas que sufren diabetes.
De este modo, no se encontraron pruebas significativas que avalasen la creencia basada en torno a los posibles problemas cardiovasculares que pudiesen causar, observándose reducciones significativas en la presión arterial diastólica y la glucosa en sangre en ayunas.
Según aclara el trabajo, los edulcorantes no calóricos pueden formar parte de un plan de alimentación totalmente balanceado y seguro basándose en la absorción, metabolismo y eliminación total y rápida por parte del organismo.
Dentro de estas características se encuadran edulcorantes tan extendidos como el acesulfamo, aspartamo, sacarina, stevia o sucralosa, aunque, aclara, su ingesta continua siempre debe venir determinada por un especialista o nutricionista.