Así es como ocurrió este fin de semana.
Con la nueva cepa y con los asintomáticos, al no apreciar cambios en el estado de salud de nuestros acompañantes o, en caso de ser nosotros los contagiados, no hemos llevado a cabo cuadro patológico alguno que nos aconseje omitir el contacto con otra gente.
Y entonces continuamos con la reunión social sin muchas precauciones: con amigos o familiares para charlar mientras se consumen bebidas o comidas (momento en el que nos quitamos la mascarilla) en un domicilio particular o en un espacio púbico, forma parte de todas esas ocasiones frecuentes en las que se desarrollan hasta el 60% de los contagios por el virus SARS CoV2.
y esto es lo que está ocurriendo ahora mismo.
Tenemos que tener a partir de yá muchas precauciones o esto se nos sale de madre, de nuevo.
Vamosss!!!
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El 60% de los contagios por el coronavirus proceden de asintomáticos
Covid-19: el pasado fin de semana hubo récord de contagios y más de la mitad de las nuevas transmisiones se han atribuido a personas asintomáticas.
Desde el principio de esta pandemia se ha constatado la facilidad de transmisión del virus SARS CoV-2 al contagiar a un gran número de portadores que no ofrecen síntomas apreciables de la enfermedad, pero ahora las cifras de contagios procedentes de personas asintomáticas son alarmantes.
Contagios “inocentes”
Quedar con amigos o familiares para charlar mientras se consumen bebidas o comidas (momento en el que nos quitamos la mascarilla) en un domicilio particular o en un establecimiento púbico, es una de las situaciones más habituales en las que se producen hasta el 60% de los contagios por el virus SARS CoV2 y esto es debido a que, ni nosotros apreciamos alteraciones en el estado de salud de nuestros acompañantes o, en caso de ser nosotros mismos los contagiados, no habremos desarrollado cuadro patológico alguno que nos aconseje evitar el contacto con otras personas.
Cierto es que la mayoría de los asintomáticos pasan la infección sin alteraciones reseñables (o muy leves) y que la carga viral que se emite en estas condiciones es menor que la de personas con el Covid-19 desarrollado en un estado agudo, pero el problema reside en la resistencia del sistema inmunológico de la persona que resulta contagiada por un asintomático: en muchos casos tienen capacidad para desarrollar la enfermedad con episodios de extrema gravedad ya que, aunque hayan recibido una carga viral baja, es su sistema de defensas el que no tiene capacidad para neutralizarla y se puede producir un cultivo y multiplicación del virus hasta cifras extremadamente peligrosas.
Las cifras de la realidad
El equipo de Jay C. Butler, de los Centros de Prevención y Control de Enfermedades (CDC), en Atlanta, Estados Unidos, ha determinado que los portadores asintomáticos del virus causante de la Covid-19 ocasionarían más de la mitad de todas las transmisiones actuales, refrendando así los datos difundidos en el mes de septiembre por Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas (NIAID) y responsable de la pandemia covid-19 en Estados Unidos.
Además, se ha constatado que las diferentes mutaciones del virus (como puede ser el caso de la denominada cepa “Britanica”), han ganado capacidad de difusión (hasta un 70% mayor), manteniendo un elevado grado de contagiados asintomáticos (baja viralidad), lo que favorecería de manera drástica la extensión de la pandemia entre toda la población.
Desequilibrio infeccioso
En las conclusiones de esta última publicación se confirma que el 30% de las personas con infección nunca desarrollan síntomas y son un 75% más infecciosas que las que desarrollan algún cuadro clínico. Combinados todos los factores analizados, el hallazgo implicaría que las personas con infección que nunca desarrollan síntomas pueden representar aproximadamente el 24% de todas las transmisiones.
La duración del período infeccioso se mantuvo en 10 días y la infecciosidad máxima varió entre 3 y 7 días (-2 y +2 días en relación con la mediana del período de incubación).
El caso de Wuhan
Estudios paralelos desarrollados en la Universidad de Wuhan han concluido que hay una gran cantidad de portadores asintomáticos tras la eliminación de los casos clínicos de covid-19, y estas infecciones sin síntomas pueden contagiar a personas susceptibles e incluso originar una cepa altamente virulenta que reactive la epidemia en China.
A pesar de los férreos controles que se mantienen en el país, el goteo diario de casos se debería a estos infectados invisibles para los sistemas sanitarios de vigilancia.