TRATAMIENTO DEL CHASQUIDO MANDIBULAR

El chasquido mandibular, también conocido como crepitación o clic mandibular, es un síntoma que se presenta cuando existe un desajuste en la articulación temporomandibular (ATM). Este desajuste puede generar un ruido característico al abrir o cerrar la boca, y en algunos casos, puede ir acompañado de dolor o incomodidad.

Desalineación Dental: La mala alineación de los dientes puede provocar un estrés adicional en la ATM. Bruxismo: El hábito de rechinar o apretar los dientes, especialmente durante la noche. Lesiones: Traumatismos directos en la mandíbula o en la cabeza. Estrés: El estrés y la tensión emocional pueden llevar a hábitos como apretar los dientes.

En La Clínica FisioMuro, ofrecemos una variedad de tratamientos personalizados para abordar el chasquido mandibular, que incluyen: Fisioterapia La fisioterapia es fundamental para el tratamiento del chasquido mandibular. Nuestros fisioterapeutas especializados utilizan técnicas avanzadas para aliviar el dolor y mejorar la función de la mandíbula. Entre las técnicas utilizadas se encuentran: Terapia Manual: Manipulación y movilización de la ATM para reducir el desajuste. Ejercicios de Estiramiento y Fortalecimiento: Ejercicios específicos para mejorar la flexibilidad y la fuerza de los músculos mandibulares. Ultrasonido Terapéutico: Uso de ondas sonoras para reducir la inflamación y el dolor. Osteopatía La osteopatía ofrece un enfoque holístico, considerando el cuerpo como un todo. En el tratamiento del chasquido mandibular, nuestros osteópatas pueden: Realizar Ajustes Manuales: Para mejorar la alineación de la mandíbula y reducir el estrés en la ATM. Técnicas de Liberación Miofascial: Para aliviar la tensión en los músculos y tejidos conectivos alrededor de la mandíbula. Uso de Férulas Dentales Las férulas o placas de mordida pueden ser útiles para: Reducir el Bruxismo: Disminuyen la presión ejercida sobre los dientes y la ATM durante la noche. Mejorar la Alineación: Ayudan a corregir la mordida y mejorar la posición de la mandíbula.

La prevención es clave para evitar la aparición o el empeoramiento del chasquido mandibular. Algunas recomendaciones incluyen: Higiene Postural Mantener una Buena Postura: Especialmente al trabajar o estudiar, para evitar tensión en el cuello y la mandíbula. Ejercicios de Relajación: Técnicas como el yoga o la meditación pueden ayudar a reducir el estrés y la tensión. Cuidado Dental Visitas Regulares al Dentista: Para monitorear la salud dental y corregir problemas de alineación. Uso de Protectores Bucales: Especialmente si se practica deporte o se padece de bruxismo.